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Un Dios y un pretendiente Roberto Ingersoll fue un conocido orador de antaño que era célebre por atacar el concepto de la fe en Dios. En cierta ocasión, se le invitó a dar un discurso sobre el infierno. Él declaró
El triunfador desalentado
El triunfador desalentado En el año de 1858, la legislatura del estado de Illinois – usando un estatuto arcano – envió a Esteban Douglas al Senado nacional en lugar de Abraham Lincoln, a pesar de que éste había ganado el
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La envidia envenena Se cuenta la historia de un águila que sentía envidia de otra águila que volaba mejor que ella. Cierto día, el águila vio a un cazador con arco y flecha, y le dijo: ¡Ojalá bajaras aquella ave que
¿A quiénes ayuda Dios?
¿A quiénes ayuda Dios? Entre las fábulas de Esopo se encuentra la historia de un hombre que, al manejar una carreta por el camino, repentinamente se quedó atorado en el lodo. El hombre empezó a injuriar a los dioses. ¿Por
El misionero
El misionero más grande A través de la historia del cristianismo se han levantado grandes hombres y mujeres para servir como misioneros a tierras lejanas. Tomás, el discípulo que dudó, posteriormente hizo un viaje a la India para sembrar iglesias.
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No temas Existe una emoción que todos hemos experimentado, pero que a nadie le gusta reconocer. Es una emoción que ha sido parte de nuestra vida desde la niñez. Toma muchas formas distintas, y en su forma más fuerte, nos
¿Cómo es el Reino de Dios?
¿Cómo es el Reino de Dios? La mayoría de nosotros ha tenido la oportunidad de conocer personas de países distintos a los nuestros. Una de las primeras preguntas que muchas veces hacemos, al conocer a alguien de otra nación, es
La unión verdadera
La unión verdadera Hoy en día se habla mucho acerca de la unión. En la unión está la fuerza, dice la gente. Tenemos que unirnos en la lucha contra la pobreza, o contra la enfermedad, o cualquier otro mal social que se enfoque actualmente. Este es
Confrontación cristiana
Confrontación cristiana La confrontación. Es una palabra que a ninguno de nosotros nos agrada, a menos que tengamos un carácter pugnaz. No nos gusta la idea de pelear, de tener argumentos, de estar en desacuerdo con otra persona. Por naturaleza,